Semana Santa en Ourense

La Semana Santa, que conmemora la Pasión de Jesucristo, es uno de los momentos más importantes del calendario cristiano. En Ourense sus actos religiosos se iniciaron en la Edad Media, fomentados por los gremios de artesanos y comerciantes, y se potenciaron con la llegada de los franciscanos en los siglos XIV y XV.

Hoy en día se ha convertido en una ocasión ideal para conocer la ciudad de Ourense, ya sea por sus actividades festivas y religiosas, como por sus otras propuestas puramente turísticas.

Semana Santa en Ourense: fechas y festivos

La Semana Santa tiene lugar entre dos de las fiestas más destacadas de Ourense, como son el Entroido (Carnaval) y Os Maios. El período de celebración de la Semana Santa se basa en el calendario lunar, por lo que su fecha es variable y puede coincidir tanto a finales de marzo como en el mes de abril. Concretamente, el domingo tras la primera luna llena de la primavera sirve para asignar el Domingo de Resurrección, y sobre este día se define el resto de la Semana Santa.

En Ourense, y en general en toda Galicia, los festivos suelen coincidir con el Jueves Santo y el Viernes Santo, los previos al Domingo de Resurrección. Por otro lado, las vacaciones escolares se extienden desde el viernes anterior al Domingo de Ramos hasta el Domingo de Resurrección.

Programa de Semana Santa: procesiones y tradiciones

Aunque la fiesta de San Lázaro anuncia la proximidad de la Semana Santa, las celebraciones propias de la Pascua en Ourense comienzan con el pregón el miércoles anterior al Domingo de Ramos. El viernes siguiente (Viernes de Dolores) tiene lugar un viacrucis que, partiendo de la Iglesia de la Trinidad, recorre las calles de la zona histórica y finaliza en la Catedral.

El Domingo de Ramos se inicia con la vistosa Procesión de la Borriquilla (Bendición de Ramos), en la que una multitud cargada con ramas de laurel, olivo y palmas blancas rememora la entrada de Jesucristo en Jerusalén. Esta procesión la protagoniza una talla de madera de un Cristo a lomos de una borrica, creada en 1960 por el escultor compostelano Andrey. El momento más esperado tiene lugar con la bendición de los ramos. Tras la misma, la comitiva se dirige a la Catedral en una procesión conocida como el Paso de los Niños.
Este día la tradición manda portar las mejores galas, preferiblemente ropa nueva, ya que según el dicho “quien no estrena en Ramos, no estrena en todo el año”.

El Miércoles Santo se suprimen las misas vespertinas en la ciudad y tiene lugar una Misa Crismal en la Catedral. Por la noche se celebra procesión por el barrio de A Carballeira con el paso del Nazareno. Se trata de una imagen articulada con vestimentas y pelo natural que data del siglo XVIII y representa un Cristo portando la cruz rumbo al Monte del Calvario.

El Jueves Santo, por la mañana tiene lugar el solemne Oficio de Lecturas y Laudes en la Catedral. Por la tarde, esta basílica acoge la celebración “In Coena Domini”, en la que se realizan el lavatorio de los pies y una procesión con el Santísimo al Monumento. La Procesión con el Cristo del Perdón recorrerá la parroquia de Velle. Esta talla, también conocida como Cristo de la Paciencia, es una obra del Maestro Sobrado del siglo XVI y representa a Jesús sentado en un peñasco con las manos atadas, un martillo a sus pies y la corona de espinas en su cabeza.

El Viernes Santo, por la mañana tiene lugar el Oficio de Lecturas y Laudes en la Catedral. Por la tarde, en este mismo templo se celebra la Pasión del Señor, así como una de las comitivas de referencia en la ciudad, la Procesión del Santo Entierro. Formada por nueve pasos, entre los que se encuentran imágenes que datan del siglo XVI como la Flagelación, y otras que destacan por su gran realismo como La Piedad o El Cristo Yacente. Esta última, datada en el siglo XVIII, es una talla articulada que se coloca en una urna elaborada en ébano y engastes de marfil y plata, y se trata de una de las imágenes que se conservan de la antigua Semana Santa de la ciudad.

El Sábado Santo, antes de las primeras luces del alba, parte de la Iglesia de la Trinidad la Procesión dos Caladiños (La Soledad) que realiza un viacrucis en solemne silencio. Tras el sermón en la Catedral, regresa a la iglesia inicial. Posteriormente se realiza el Oficio de Lecturas y Laudes en la Catedral. Por la noche la Catedral de San Martiño acoge otro de los cultos destacados: la sobrecogedora Vigilia Pascual, misa que empieza a oscuras y que poco a poco llena de luz de cirios y velas el templo.

Los actos del Domingo de Pascua de Resurrección se inician a media mañana con la procesión de la imagen de Santa María Madre a la Catedral, donde tiene lugar el encuentro de Santa María con el Cristo Resucitado. Tras la misa de la Resurrección, la imagen de la santa regresa a su iglesia titular. Es en esta procesión cuando se produce uno de los momentos más singulares de la Semana Santa en Ourense: la ceremonia del Desplante. Se trata del último acto de la Pascua en Ourense, y se remonta al conflicto existente entre las autoridades eclesiásticas y el poder municipal en el siglo XVIII, cuando el gobierno local se negó a sufragar el arreglo de la escalinata que da acceso al templo. Por ello, cuando se realiza el regreso de la imagen de Santa María a su iglesia titular, las autoridades municipales deben permanecer en la parte inferior de la escalinata mientras los representantes religiosos ascienden a la iglesia. Antes de entrar a este templo por su puerta principal, saludan desde lo alto a las autoridades municipales, quienes deberán entrar por un acceso lateral.

Consulta los horarios de las procesiones Semana Santa 2024 en Ourense (web Obispado de Ourense).

Gastronomía

La gastronomía ocupa un puesto destacado en la Semana Santa. Los platos tradicionales vienen marcados por la vigilia, protagonizada por elaboraciones a base de pescado o marisco, en especial el pulpo y el bacalao. Son muchos los restaurantes que ofrecen platos especiales para estas fechas. Y por supuesto, también encontramos los puestos de pulpeiras, que se colocan en muchas esquinas de la ciudad los fines de semana y domingos.

En cuanto a los postres, son varias las opciones, y las pastelerías de la ciudad se llenan de especialidades propias de estas fechas, como son las tradicionales torrijas y roscones, y otras delicias más actuales como son los huevos y monas de chocolate. También se pueden probar otros dulces como las bicas o las elaboraciones a base de castaña, como el marron glacé o la tarta de San Martiño.